Agricultura y Riego
En función de la enfermedad que amenace al trigo y la cebada se debe actuar con rapidez y aportar nuevas soluciones de protección para las cosechas. Existen hongos patógenos que afecta a los cereales según sensibilidad y condiciones atmosféricas.
La naturaleza está compuesta de sucesiones de números, de formas geométricas y de una serie de proporciones que asombran al ser humano. El número áureo es una proporción común en la naturaleza, que se encuentra por ejemplo en los nervios de las ramas, o en las espirales de la piña.
La alfalfa es una opción interesante para encabezar la rotación de cultivos extensivos. Es un excelente precedente del cereal de invierno y además muy rentable. Una planta vivaz y protectora que fija el nitrógeno, disminuye la erosión y corta además las enfermedades del trigo y de la cebada.
El cultivo de pistacho persigue la adaptabilidad, la rentabilidad y unas mayores productividades, así como la diversificación de cultivos. Su rendimiento está estimado en unos 1.200 kilos por hectárea y los costes de producción no son altos, ya que no precisa ningún tipo de tratamiento.
El olivo, como cualquier otro tipo de árbol, si se le proporciona el agua durante los períodos críticos, cuando tiene sed, habrá una mejora notable en su producción de frutos, tanto en cantidad como en calidad, protegiendo contra el riesgo de sequía y favoreciendo la posibilidad de gran cosecha.