La bomba de riego, el corazón del sistema
En riego presurizado, la bomba representa el corazón y su mantenimiento es fundamental para que todo el sistema funcione sin problemas.
La bomba de riego de una explotación agrícola, debe suministrar el caudal necesario a una presión determinada al sistema de riego. Se requieren tareas de mantenimiento.
Pruebas de rendimiento de la bomba de riego
Son tres los datos que un profesional debe comprobar periódicamente en la prueba de rendimiento del grupo de bombeo:
- El caudal.
- La presión (incluye la elevación desde la fuente de agua y la presión de trabajo que debe descargar a las tuberías de riego).
- La energía de la fuente de alimentación (kilowatios en bombas eléctricas o consumo de combustible en bombas autopropulsadas).
Esta prueba proporcionará al productor los caballos de fuerza del agua que se producen en el caudal y la elevación total de la bomba. Además, también indicará la eficiencia global de la bomba midiendo los caballos de fuerza de la energía de alimentación, en comparación con los caballos de fuerza del agua que sale de la bomba, reflejando la eficacia con la que el agua llega al sistema de riego.
Si alguno de estos tres puntos muestra un rendimiento deficiente de la bomba, será necesario corregir el problema. El objetivo final es obtener un caudal y una presión adecuados para el sistema de riego.
La bomba de riego requiere de la instalación complementaria de caudalímetro y manómetros.
Gestionar bien el agua de riego exige de un medidor de caudal que muestre el volumen de agua bombeada en tiempo real, así como la cantidad total aplicada.
Es importante registrar los datos al principio de cada temporada, para conocer finalmente con exactitud la cantidad total aplicada al cultivo. Esto no indica si se ha aplicado uniformemente, pero podremos conocer cuánta agua se ha bombeado.
Con la ayuda de manómetros, podremos identificar si la presión disponible es la adecuada para el diseño de cada sistema de riego especifico.
Además, la revisión se debe extender más allá del bombeo:
- Comprobar la filtración. Los filtros deben mantenerse limpios y los equipos en buen estado, para garantizar un suministro limpio a los emisores.
- Comprobar la calidad del agua. Se debe estudiar la calidad de agua para determinar qué hace falta en campo.
- Limpiar la red de tuberías. Es recomendable limpiar las tuberías a alta presión todos los años, abriendo las válvulas finales de purga.
- Supervisar la uniformidad del riego. Identificar periódicamente la uniformidad de distribución del riego puede también arrojar luz sobre otras cuestiones que estén afectando al rendimiento.
Ejemplo real
En una explotación agrícola, el caudalímetro determinó un caudal bajo a causa del descenso del nivel freático. Cuando se realizó una prueba de uniformidad de distribución, ésta también había decrecido. Al identificarlo, se pudo contrarrestar el problema aumentando la potencia, consiguiendo que el caudal volviera a aumentar.