Suministro eléctrico con energías renovables
Una instalación de energías renovables permite proveer la energía eléctrica necesaria para llegar a alimentar determinados consumos, sin importar si existe suministro eléctrico o no. Lo ideal sería coordinar tecnologías como la eólica y la solar (si es posible, incluso combinar con la hidráulica) y de este modo, existirá una generación estable y equilibrada independientemente del momento del día y de la estación del año.
Elementos de una instalación combinada
Aerogeneradores
Utilizando la fuerza del viento consiguen generar electricidad durante el día y la noche. En función de las necesidades de consumo que tenga la instalación, se emplearán aerogeneradores de diferentes potencias.
Paneles solares
A partir de los rayos solares generan electricidad. En este caso, su producción está limitada a las horas de sol. Dependiendo de la demanda energética necesaria, de la potencia o el tamaño de los paneles y las unidades a instalar, variarán.
Reguladores
Vigilan el estado de las baterías y la energía generada por los paneles solares o los aerogeneradores. Impiden la sobrecarga o descarga de las baterías.
Baterías
La energía generada se almacena en baterías y posteriormente se suministra cuando es necesario su consumo. Es aconsejable disponer de una autonomía mínima de tres días.
Inversores
La corriente continua almacenada en las baterías, es transformada por los inversores en corriente alterna, energía apta para el consumo. Si existe en la instalación un grupo electrógeno como fuente externa de corriente alterna, puede integrar un cargador para la recarga de las baterías.
Hay modelos de inversores distintos que admiten amplias posibilidades. Por ejemplo, algunos inversores permiten la interacción con grupos electrógenos, con la red eléctrica o entre ellos, facilitando aplicaciones diferentes como instalaciones trifásicas, etc.
Diseño de una instalación de energías renovables
Gracias a los informes locales o registros públicos de organismos oficiales, podemos conocer la radiación solar y la velocidad del viento en la zona a lo largo del año; con los datos de consumo de la explotación facilitados por el usuario (automatizaciones, bombeo de agua, alumbrado, ventiladores, comunicaciones, motores, etc.), podemos concretar las necesidades energéticas de la instalación, y con todo ello, evaluar cuál puede ser la generación de energía y especificar los elementos generadores de energía requeridos para abastecer la demanda energética, las baterías necesarias para asegurar la acumulación y el suministro, los inversores, los reguladores, etc.
